Isla cuyo señorío obtiene Apolidón, sabio y nigromante hijo del rey de Grecia, y donde vive con Grimanesa durante dieciséis años, al cabo de los cuales deja encantado el lugar, para que sólo pueda ser ganado por alguien similar a ellos en fortaleza, lealtad amorosa y hermosura. Con el objeto de verificar dichas cualidades en los aspirantes, establece dos pruebas: el arco de los leales amadores, que mide la fidelidad amorosa, y la cámara defendida, donde sólo pueden entrar aquel que supere en armas a Apolidón y aquella que venza en hermosura a Grimanesa. Amadís logra pasar las dos pruebas y es nombrado señor de la isla; tras sus desposorios con Oriana, ésta también supera las pruebas, con lo que acaban los hechizos. Cuando se acerca el final de sus vidas, Urganda deja encantados en la Insula Firme a Amadís, Esplandián y a otros muchos reyes y caballeros, que saldrán del lugar en tiempos del rey Arturo, para ayudarle a reconquistar las tierras perdidas por los cristianos.