Mujer de Zifar y madre de Garfin y Roboán, a los que pierde cuando son pequeños. Es separada de su marido al entrar en una embarcación, cuyos marineros se dan la muerte por ella. Mujer de santa vida, funda el monasterio de la Dueña Bendicha en Galán; al cabo de nueve años, parte hacia su tierra, pero la nave es ingobernable, pues la guía Jesucristo; llega a los dominios del rey de Ester. Acude a Mentón, donde reina Zifar, que ha contraído nuevas nupcias; en Mentón funda un hospital, en el que se alojarán Garfin y Roboán, junto a los que se acuesta, por lo que es denunciada al rey. La oportuna muerte de la reina permite a Zifar reconocerla públicamente como su mujer y a Garfin y a Roboán como a sus hijos legítimos.