Iseo la Rubia
Categoría
La leyenda tristaniana narra la historia de Tristán y de Iseo, hija de Anguín, rey de Irlanda, que es concedida en matrimonio al rey Marco de Cornualles
La leyenda tristaniana narra la historia de Tristán y de Iseo, hija de Anguín, rey de Irlanda, que es concedida en matrimonio al rey Marco de Cornualles. Durante la travesía de Irlanda a Cornualles, Iseo y Tristán, el sobrino del rey Marco que acompaña a la princesa, beben por error un filtro mágico, destinado al rey Marco y a Iseo, que había de proporcionar un amor eterno a quien lo bebiera. Iseo, convertida por efecto del brebaje en la amante de Tristán, llega a la corte de Marco y contrae matrimonio. Los amantes consiguen ocultar su relación en secreto durante un tiempo gracias en parte a la sangre fría y capacidad de improvisación de la reina, pero finalmente son descubiertos y deben huir de la corte y refugiarse en un bosque. La vida de los amantes en el bosque constituye el episodio central de la leyenda, pero finalmente Iseo vuelve a la corte de su esposo y Tristán vuelve a Bretaña, donde se casa con Iseo de las Blancas Manos porque lleva el mismo nombre que su amada, aunque no consuma el matrimonio y sigue intentando ver a la reina. Iseo la Rubia, cuyos conocimientos de artes médicas ya habían salvado la vida de Tristán en una ocasión antes de que ambos compartieran el filtro, acude en ayuda de su amigo cuando éste resulta herido por un arma envenenada. A su llegada, Tristán ya ha muerto, a causa del engaño de Iseo de las Blancas Manos, que le había hecho creer que la reina no acudía a su llamada. El dolor por la muerte de Tristán provoca la muerte de la reina Iseo. En algunas versiones del Tristan en prosa, el episodio de la muerte de los amantes difiere en el sentido que Tristán es asesinado a traición por el rey Marco mientras estaba cantando para la reina; Iseo muere asimismo en brazos de su amigo agonizante. Sobre esta base argumental, creada por la adición de episodios diversos a partir de un núcleo de origen celta que comprende los personajes principales de la historia (Tristán, Marco e Iseo), la figura de la reina Iseo se construye de maneras diversas según los textos y sus autores. En todos los casos, la reina Iseo se presenta como una joven de una belleza extraordinaria, con una larga cabellera rubia, y poseedora de unos conocimientos de medicina que le habían sido transmitidos por su madre. Asimismo, en el Tristan en prosa aparece dotada de conocimientos de poesía y música que había recibido de Tristán, famoso por su excelencia en tales artes. Se ha considerado la posibilidad, atendiendo al paralelismo establecido entre la historia de Tristán e Iseo y la narración irlandesa de Diarmaid y Grainne, que en su origen la figura de Iseo fuera la de un personaje paralelo a Grainne, que intenta despertar el amor en un joven que, para no ser infiel a su tío, y esposo de Grainne, se niega a tal relación y que a causa de esta negativa será víctima de un secuestro por medio de las artes mágicas de la enamorada mujer. En los textos franceses, Iseo conservaría algunos rasgos propios del arquetipo como por ejemplo su determinación y algunas actitudes que reflejan una cierta crueldad, como su intento de matar a Brengaín, su fiel sirvienta, para que nadie pueda desvelar el secreto de su amor. Pero, en cualquier caso, en la versión de la leyenda que se ha conservado, Iseo es una víctima y no una instigadora del amor. La función del filtro en la aparición del amor entre Tristán e Iseo ha sido un problema largamente debatido, ya que implica la voluntad o falta de voluntad por parte de los amantes de convertirse en tales, y en consecuencia implica una concepción muy distinta del amor según el filtro sea el causante primero y único del amor o sea considerado sólo como símbolo de un amor asumido por voluntad propia por parte de los amantes. Es interesante, sin embargo, observar que antes de compartir el filtro, Iseo ya había establecido una relación ambigua de amor-odio con Tristán, que por un lado había dado muerte al tío de Iseo, el gigante Morholt, y por otro había salvado su país de la amenaza terrible de un dragón que exigía jóvenes doncellas como tributo. Hay que observar además que el amor de Tristán e Iseo no se extingue al cabo de unos años, cuando cesa el efecto del filtro, sino que continúa vivo. Los diversos autores destacan rasgos distintos de la personalidad de la reina, e incluso en un mismo texto podemos observar diferentes facetas de su personalidad como su astucia y habilidad en la improvisación de excusas y recursos para conservar el secreto de su amor, su pasión, su voluntad y su personalidad decidida, pero también el pánico a ser descubierta, su soledad en una corte extranjera y hostil, o las contradicciones y altibajos de su carácter sometido a la tensión continua provocada por su amor por Tristán y el respeto y fidelidad que debe a su esposo, obligaciones de las que es perfectamente consciente. En el Tristan en prosa, la reina aparece como orgullosa y dominante y en su comportamiento se observan algunos rasgos negativos, especialmente en su actitud despiadada y cruel para con algunos caballeros que le demuestran su amor como Kaherdín o Palamedes.
passim.
más
Beal
Genero
Femenino
Textos
passim.