Es el rey pagano —sarraceno, especifica la Continuación de Perceval, de Gerbert de Montreuil— de la ciudad de Sarraz. Casado con Sarracinta, tiene dos hijos, Elyeser y Grimal, éste ilegítimo, y es cuñado de Nascién o Serafe. Es el padrino de Clarín. Se le llama «li Mesconneüs» (el Despreciado, el No Reconocido) porque se ignora dónde nació. Será Josefés, el hijo de José de Arimatea, quien le revelará que tuvo por padre a un humilde zapatero remendón de Meaux, en Francia, que se vio obligado a entregarlo, aún niño, como tributo a los romanos. Enviado a Siria, Evalach escapa de su condición servil tras asesinar al hijo del gobernador Félix y huir al país de Tolomer, en cuyo ejército sirve distinguidamente. Recompensado con un reino, deberá defender sus posesiones frente a la ambición invasora del mismo Tolomer; favorecido con el consejo de Josefés o de José de Arimatea y protegido por Dios, triunfa sobre su antiguo señor, lo que le mueve a abrazar la fe cristiana. Es bautizado entonces como Mordraín, que significa, según el narrador de la Estoire del Saint Graal, «de fe tardía». (Para los detalles de su vida posterior, véase Mordraín.)