Caballero de Arturo y Conde de Handitou. Se destaca por su hospitalidad, ya que acoge a Meraugís y a sus compañeros en su residencia. Por ayudar a Lanzarote contra cuatro caballeros que le atacan, Gladoaín es atravesado por una lanza, y así, mortalmente herido, se refugia en el Castillo Pobre, lugar al que llega Galván después de su experiencia fracasada en el castillo del Rey Pescador. Gladoaín avisa al sobrino de Arturo del peligro que todavía corre Lanzarote, y Galván va en su ayuda. Después, él y Lanzarote regresan al Castillo Pobre, donde les informan de que Gladoaín ha muerto. Al día siguiente, por la mañana, tiene lugar su entierro y, luego, Lanzarote y Galván se van por caminos diferentes. Al poco de cabalgar, Lanzarote se encuentra con el caballero del Escudo Verde, hermano gemelo de Gladoaín, al que va buscando para que acuda a su reino, las Insulas de los Moros, a luchar contra un caballero que, en su ausencia le ha robado un castillo, la Roca de Gladoaín. Puesto que el hermano del Caballero del Verde Escudo ha muerto, Lanzarote, que se siente en deuda con él por haberle ayudado contra sus enemigos, va a las Insulas de los Moros, lucha contra el caballero que ha robado el castillo y la tierra de Gladoaín, y le corta la cabeza. Con ello las posesiones de Gladoaín vuelven a manos de su familia.